Día 1 Santiago/Frankfurt
Día 2 Frankfurt/Baden Baden/Estrasburgo/Selva Negra
Día 3 Selva Negra/Titisee/Freiburg/Selva Negra
Día 4 Selva Negra/Lago Constanza/Meersburg/Selva Negra
Día 5 Selva Negra/Riquewirh/Colmar/Estrasburgo
Día 6 Selva Negra/Triberg/Gegenbach/Manheim/Wienheim
Día 7 Manheim/Wienheim/Heidelberg/Frankfurt
Día 8 Frankfurt/Santiago
Precio por persona en habitación doble desde 1.888 € por persona (tasas aéreas y tasa de seguridad aeroportuaria incluidos).
Salida desde Santiago entre el 7 de julio y el 8 de septiembre.
Precio incluye:
- Billete de avión.
- Alojamiento en hotel.
- Traslados.
- Seguro de asistencia en viaje.
Contrato de viajes combinados: condiciones generales
La Selva Negra, ubicada en el corazón de Europa, es un destino fascinante que ofrece una mezcla encantadora de cultura, historia y paisajes naturales. Comenzando nuestro viaje en Frankfurt, la ciudad alemana combina la modernidad con su rica herencia cultural. Desde aquí, el viaje nos lleva a Baden Baden, conocida por sus elegantes spas y belleza arquitectónica, seguido de un paso breve por Estrasburgo, donde la influencia francesa se hace patente en su exquisita gastronomía y arquitectura distintiva.
Al adentrarnos en la Selva Negra, el ambiente cambia. Los densos bosques y el aire puro son el escenario perfecto para descubrir lugares como el lago Titisee, donde un paseo en barco ofrece vistas impresionantes de la naturaleza circundante. Freiburg, con su emblemática catedral y calles vibrantes, también forma parte de esta aventura, mostrando la rica historia de la región.
El Lago Constanza y Meersburg nos reciben con su tranquilo esplendor y un castillo que parece sacado de un cuento de hadas, mientras que en Riquewihr y Colmar, dos de las joyas de Alsacia, el encanto medieval y los viñedos crean un paisaje de ensueño. La visita a Estrasburgo nos permite volver a sumergirnos en su cultura cosmopolita y disfrutar de una noche bajo las estrellas de Europa.
Nuestro recorrido también nos lleva a Triberg, famoso por sus relojes cucú y las más altas cataratas de Alemania, y a Gegenbach, cuyo encanto medieval es simplemente inolvidable. Antes de concluir el viaje, visitamos Mannheim y Weinheim, donde la historia se palpa en cada rincón, y Heidelberg, cuyo impresionante castillo y panorámicas del río Neckar son el preludio perfecto para nuestro regreso a Frankfurt.
Este itinerario por la Selva Negra no solo es un viaje a través de hermosos paisajes, sino una experiencia cultural profunda que ofrece un vistazo a la vida en algunas de las ciudades y pueblos más pintorescos de Alemania y Francia. Cada día revela una nueva faceta de esta región encantadora, haciendo de cada momento un recuerdo duradero. Al volver a Santiago, llevamos con nosotros un pedacito de Europa, anhelando la próxima oportunidad de explorar sus innumerables maravillas.